BepiColombo listo para su lanzamiento a mediados de octubre

Impresión artística de BepiColombo en Mercurio. Crédito: ESA

La primera misión europea a Mercurio, BepiColombo, está proyectada para ser lanzada temprano en la mañana del 19 de octubre. Esta es una misión conjunta de la ESA-JAXA que será lanzada a bordo de un cohete Ariane 5 en el puerto espacial de Kourou, compuesta de un trio de naves espaciales camino a Mercurio. 

Las naves espaciales viajarán juntas: un módulo de transferencia portará los dos orbitadores científicos – el orbitador planetario de Mercurio de la ESA y el orbitador magneto esférico japonés de la JAXA – empleando una combinación de energía solar y propulsión eléctrica, y nueve sobrevuelos de asistenciales gravitacionales por medio de la Tierra, Venus y Mercurio. 

El lanzamiento está programado para aproximadamente las 01:45 GMT (03:45 CEST), equivalente al 18 de octubre a las 22:45 hora local (GFT). La ventana de lanzamiento permanece hasta el 29 de noviembre. 

BepiColombo in una órbita terrestre baja. Crédito: ESA

“Hemos tenido un gran comienzo en nuestra campaña de lanzamiento en Kourou, estamos en curso para el lanzamiento en 90 días” dice Ulrich Reininghaus el gerente de proyecto de la ESA para BepiColombo. “Tenemos un programa verdaderamente apretado, pero es fantástico ver nuestra nave espacial finalmente ensamblada montada.”

Desde la llegada al puerto espacial en mayo, se han completado muchas preparaciones esenciales. Por ejemplo, la nave espacial ha sido dotada de su capa de protección para altas temperaturas, los tanques de xenón y nitrógeno han sido comprobados, rellenados y presurizados, y test de despliegue de los paneles solares están e instalaciones finales están en curso. 

Módulo de trasferencia a Mercurio en el simulador espacial.  Crédito: ESA

También han dado comienzo las simulaciones de operaciones claves en el Centro de Operaciones de la ESA en Darmstadt, Alemania, (ESOC). También, el personal está practicando eventos de no rutina para cualquier eventualidad en el camino hacia Mercurio. 

La nave espacial compuesta ‘apilada’ realizará el primer sobrevuelo de Mercurio tan solo tres años tras su lanzamiento. Una serie de instrumentos científicos estarán activos durante los sobrevuelos planetarios, con el potencial por parte de los módulos de transferencia de las ‘webcams’ de capturar imágenes simples antes de que la cámara principal esté operativa en la orbitando Mercurio. 

Las dos naves, una vez separadas en sus dos orbitas científicas, harán mediciones complementarias del planeta más interno y de su entorno, desde su interior profundo hasta su interacción con el viento solar, para aportar el mejor entendimiento de Mercurio hasta la fecha. Las averiguaciones aportaran una visión de cómo los planetas internos de un Sistema Solar se forman y evolucionan tan cerca de sus estrellas progenitoras. 

Vista de los componentes de BepiColombo desplegados. Crédito: ESA 

Puntos clave acerca de Mercurio: 

Mercurio es el planeta más interior del Sistema Solar, y está en acoplamiento de marea en una resonancia orbital 3:2 con el Sol. Posee una superficie terrestre solidada con muchos cráteres y virtualmente no tiene atmosfera, un mundo que superficialmente recuerda a la Luna. Su radio orbital medio de 0,387 UA, con un diámetro de 4879,4 km y una masa de 3,302×1023 kg o 0,055 Tierras.

Estructura de Mercurio. Wikipedia.

Sin embargo, el interior del planeta fue una sorpresa en muchos aspectos, tras la visita del Mariner 10, fue posible una buena lectura sobre su masa, descubriéndose que tiene un núcleo de hierro grande, quizá debido a impacto gigantes durante su formación, además el planeta posee un débil campo magnético, algo inesperado, también presenta actividad tectónica debido al cabalgamiento mientras el planeta se enfría y encoje.

Mariner 10. Crédito: NASA

La visita más reciente a Mercurio fue de MESSENGER, entrando en su órbita el 18 de marzo de 2011 habiendo sido lanzado el 3 de agosto de 2004, descubriendo hielo en el polo Norte del planeta y topografiando la totalidad del mismo. Insertar una nave en órbita alrededor de Mercurio es difícil, porque la nave acercándose en una trayectoria directa desde la Tierra sería acelerada por la gravedad del Sol y pasaría a Mercurio muy rápido para poder orbitarlo.

Mercurio fotografiado por la sonda MESSENGER. Crédito: NASA/JPL

Sin embargo, empleando múltiples 'sobrepasos' de gravedad asistida alrededor de Venus y Mercurio, en combinación de propulsiones con correcciones de trayectoria, para gradualmente frenar la nave espacial y por lo tanto minimizar el propelente a usar. Con lo que los viajes a Mercurio son largos y complejos. 

Fuentes: ESA, Wikipedia