Una colisión masiva en el pasado de la Vía Láctea
Nuestra galaxia la Vía Láctea probablemente ha colisionado o a interactuado con otras galaxias durante su vida; tales interacciones son ocurrencias cósmicas comunes. Los astrónomos pueden deducir la historia de la acumulación de masa en la Vía Láctea a partir de un estudio de los desechos en el halo de la galaxia que se deja como el residuo de marea de tales episodios. El enfoque ha funcionado particularmente bien para los estudios de los eventos más recientes como la incursión de la galaxia enana Sagitario hace unos miles de millones de años que dejaron corrientes de mareas de estrellas visibles en los mapas de galaxias. Sin embargo, los efectos dañinos que estos encuentros pueden causar a la Vía Láctea no se han estudiado tan bien, y los eventos aún más lejanos en el pasado son aún menos obvios, ya que se vuelven borrosos por los movimientos naturales y la evolución de la galaxia.
Sin embargo, algunos episodios en la historia de la Vía Láctea fueron tan cataclísmicos que son difíciles de ocultar. Los científicos han sabido por algún tiempo que el halo de estrellas de la Vía Láctea cambia drásticamente en carácter con la distancia al centro galáctico como lo revela la composición de las estrellas (su "metalicidad"), los movimientos estelares y la densidad estelar. El astrónomo de CfA Federico Marinacci y sus colegas analizaron una serie de simulaciones cosmológicas por computadora y las interacciones de las galaxias en ellas. En particular, analizaron la historia de los halos de galaxias a medida que evolucionaban después de un evento de fusión. Llegan a la conclusión de que hace seis o diez mil millones de años, la Vía Láctea se fusionó en una colisión frontal con una enorme galaxia enana que contiene de uno a diez mil millones de masas solares en tamaño.
Referencia(s):
"El origen de los componentes del halo estelar rico en metales galácticos con órbitas altamente excéntricas", Azadeh Fattahi, Vasily Belokurov, Alis J. Deason, Carlos S. Frenk, Facundo A. Gómez, Robert JJ Grand, Federico Marinacci, Rudiger Pakmor y Volker Springel, MNRAS 484, 4471 2019.
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