Metales lunares: una nueva investigación considera lo que se encuentra debajo de la superficie de la luna

Esta vista oblicua de la superficie de la luna fotografiada por los astronautas del Apolo 10 en mayo de 1969. Crédito: NASA.

Un nuevo estudio realizado por geólogos en Canadá y Estados Unidos sugiere que un depósito de metales preciosos puede estar atrapado en las profundidades de la superficie de la luna. 

James Brenan, profesor del Departamento de Ciencias de la Tierra y del Medio Ambiente de Dalhousie y autor principal del estudio en Nature Geoscience, dice que él y otros investigadores pudieron establecer paralelismos entre los depósitos minerales encontrados en la Tierra y la Luna. 

"Hemos podido vincular el contenido de azufre de las rocas volcánicas lunares con la presencia de sulfuro de hierro en las profundidades de la luna", dijo el Dr. Brenan, quien colaboró con los geólogos de la Universidad de Carleton y el Laboratorio de Geofísica en Washington, DC para el documento que fue publicado el 19 de agosto. 

"El examen de los depósitos minerales en la Tierra sugiere que el sulfuro de hierro es un gran lugar para almacenar metales preciosos, como el platino y el paladio". 

Bajo la superficie de la luna 

Los geólogos han especulado durante mucho tiempo que la luna se formó por el impacto de un objeto masivo del tamaño de un planeta a partir de la Tierra hace 4.500 millones de años. Debido a esa historia común, se cree que los dos cuerpos tienen una composición similar. Sin embargo, las primeras mediciones de las concentraciones de metales preciosos en rocas volcánicas lunares realizadas en 2006 mostraron niveles inusualmente bajos, lo que plantea una pregunta que ha dejado perplejos a los científicos durante más de una década sobre por qué había tan poco. 

El Dr. Brenan dice que se pensó que esos niveles bajos reflejaban un agotamiento general de los metales preciosos en la luna en su conjunto. 

Esta nueva investigación, que fue financiada con el apoyo del Consejo de Investigación de Ingeniería y Ciencias Naturales de Canadá, ofrece una explicación sobre los niveles sorprendentemente bajos y agrega información valiosa sobre la composición de la luna. 

"Nuestros resultados muestran que el azufre en las rocas volcánicas lunares es una huella digital de la presencia de sulfuro de hierro en el interior rocoso de la luna, que es donde creemos que los metales preciosos se quedaron atrás cuando se crearon las lavas", dice. 

Una recreación científica 

El Dr. Brenan, junto con sus colegas Jim Mungall de la Universidad de Carleton y Neil Bennett, anteriormente del Laboratorio de Geofísica, hizo experimentos para recrear la presión extrema y la temperatura del interior lunar para determinar cuánto sulfuro de hierro se formaría. 

Midieron la composición de la roca resultante y el sulfuro de hierro y confirmaron que los metales preciosos estarían unidos por el sulfuro de hierro, haciéndolos no disponibles para los magmas que fluían hacia la superficie lunar. 

El Dr. Brenan aclaró que probablemente no había suficiente para formar un depósito de mineral, Brenan "pero ciertamente suficiente para explicar los bajos niveles en las lavas lunares". 

El Dr. Brenan dice que requerirán muestras de la parte profunda y rocosa de la luna donde Las lavas lunares se originaron para confirmar sus hallazgos. 

Territorio no forjado 

Los geólogos tienen acceso a muestras científicas de cientos de kilómetros de profundidad dentro de la Tierra, pero dicho material aún no se ha recuperado de la luna. 

"Hemos estado rastreando la superficie de la Tierra durante un período de tiempo bastante largo, por lo que tenemos una muy buena idea de su composición, pero con la luna no es así en absoluto", dijo. 

“Tenemos un gran total de 400 kilogramos de muestra que fueron traídos por las misiones Apolo y lunar ... es una cantidad bastante pequeña de material. Entonces, para descubrir algo sobre el interior de la luna, tenemos que hacer una ingeniería inversa de la composición de las lavas que salen a la superficie”. 

La teledetección por satélites sugiere que puede haber afloramientos de las partes más profundas de la luna, revelados después de los impactos masivos que formaron los cráteres Schrödinger y Zeeman en la cuenca Aitken del Polo Sur. 

"Es bastante emocionante pensar que podríamos regresar a la luna", dice el Dr. Brenan. "Y si es así, el Polo Sur parece una buena opción para el muestreo". 

Fuente Universidad de Dalhousie,